SOFÍA SALIÓ DE SU CUARTO CON LA MIRADA TACITURNA Y ALGO DUBITATIVA, SE DIRIGIÓ A UN ÁRBOL DE SAÚCO QUE HABÍA EN SU PATIO TRASERO, MIENTRAS CAMINABA REPETÍA UNA SERIE DE PALABRAS EN VOZ BAJA, COMO RECORDANDO ALGO.
Sofía sacó un puñal muy extraño, mientras repetía unas palabras en un idioma algo extraño, cortaba un trozo del árbol, el cual fue labrando con mucho cuidado, al finalizar le quedó una especie de vara como de unos veinte centímetros de largo y con una figura de una pluma en medio, la varita brillaba con luz propia, era algo sorprendente-
-...